El verano es conocido por su variedad de frutas y verduras frescas. Muchas especies de plantas florecen y los paisajes se llenan de colores vivos.
En esta época, los días son más largos y las temperaturas suelen ser más altas que en las demás estaciones. Aunque el clima puede ser variable, con días soleados y calurosos, pero también con la posibilidad de tormentas, chubascos o incluso olas de calor en algunas regiones.
¿Qué se puede plantar?
En verano, hay una amplia variedad de cultivos que podéis plantar en vuestro huerto, como son:
Lechugas, acelgas, remolachas, cebollas, puerros, coles, coliflores, fresas, zanahorias, hinojo, apio, tomates, pimientos, berenjenas, pepinos, calabacines, calabazas, judías, boniatos, maíz, sandías y melones.
Aparte de todas las hortalizas y verduras anteriores, también hay una gran variedad de hierbas aromáticas para plantar durante el verano, como son:
Perejil, cilantro, menta, albahaca, romero, tomillo, lavanda, caléndula, manzanilla, cebollino, citronela, poleo, hierbaluisa, orégano, mejorana, ajedrea, ruda, salvia, valeriana y melisa.
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Consejos
El riego es fundamental en el verano, ya que las altas temperaturas pueden deshidratar rápidamente las plantas. Se debe regar regularmente, preferiblemente temprano en la mañana o al final de la tarde para evitar la evaporación excesiva del agua. Mantener el suelo húmedo, pero evitar el exceso de riego para evitar problemas de encharcamiento.
Las altas temperaturas pueden aumentar la proliferación de plagas y enfermedades en el huerto. Se deben realizar inspecciones regulares en busca de signos de plagas o enfermedades y tomar medidas preventivas o de control si es necesario.
Durante el verano, muchas plantas alcanzan la madurez y están listas para ser cosechadas. Hay que realizar la cosecha en el momento adecuado para asegurar la calidad y el sabor de los productos.
A continuación os dejamos un vídeo dónde explicamos todo sobre los cultivos de verano.